Los fuegos artificiales han acompañado a la humanidad desde tiempos remotos, sus historia comienza en el año 200 A.C cuando un bambú fue lanzado al fuego en China, al expandirse el aire en el interior, explotó. Los aldeanos decidieron que era un buen modo de ahuyentar a los espíritus.
Para los años 1400 y 1500, el renacimiento produjo grandes avances en arte, literatura y fuegos artificiales. Los árabes los trajeron a la Península Ibérica y se convirtieron en tradición en gran parte de España.
Tiempo después fueron abarcando gran parte del planeta, usados por la realeza y personas pudientes en celebraciones y fechas patrias, también fueron usados durante la Guerra Civil en EE.UU como “cherry bombs” (petardos con forma de cereza), pero fueron prohibidas en por su potencial tiempo después comenzaron a salir nuevos productos de menor potencialidad y para uso domestico.
Sus hermosos y llamativos colores hacen de nuestras celebraciones algo especial, esto se debe a un número relativamente pequeño de compuestos que son introducidos en las carcasas de los cohetes, el sodio metal (Na) emite una luz de color amarillo- naranja y el responsable del color azul es el cobre (Cu).
Con la llegada de las nuevas tecnologías, cada día son más los productos que se agregan al mercad en la actualidad muchas estrellas de la música acostumbran a agregar espectáculos de luces pirotécnicas para dar un show más completo.